Aplicación de las líneas de pez cebra transgénico fluorescente

La transparencia de los embriones de pez cebra permite utilizar proteínas fluorescentes para analizar la toxicidad potencial de compuestos farmacológicos, agroquímicos y cosméticos. Además, las líneas de pez cebra transgénico fluorescente pueden utilizarse para estudiar la eficacia de nuevos fármacos.

Ensayos toxicológicos

Las líneas fluorescentes de pez cebra son muy adecuadas para estudiar la toxicidad relacionada con órganos específicos mediante el análisis de imágenes. El análisis puede realizarse tanto cualitativamente como cuantificando la fluorescencia. Una de las proteínas más utilizadas es la GFP, que genera una fluorescencia verde, y el mCherry, que genera una fluorescencia roja.

Cardiotoxicidad

La cardiotoxicidad es una gran amenaza para la salud humana, especialmente durante el desarrollo del corazón en las primeras etapas de la vida. Los corazones del pez cebra son muy parecidos a los humanos, y el uso de fluorescencia verde en el corazón permite a los investigadores seguir la función cardiaca e identificar alteraciones funcionales como arritmias o fallos auriculoventriculares. Los investigadores han descubierto que los fármacos que producen toxicidad cardiaca en humanos suelen reproducir bradicardia o una arritmia 2:1 en embriones de pez cebra, que pueden analizarse en una plataforma de High Content Screening (HCS), lo que aumenta la eficacia de los ensayos de preselección.

Hepatotoxicidad

El pez cebra transgénico con fluorescencia en el hígado puede utilizarse para visualizar e identificar las células hepáticas mediante análisis de imagen, lo que facilita la identificación de toda la zona del hígado.

Nefrotoxicidad

El pez cebra fluorescente se utiliza cada vez más para analizar la función renal debido a sus similitudes con los seres humanos. El pez cebra transgénico con fluorescencia en el riñón ayuda a visualizar mejor el órgano y a detectar malformaciones del glomérulo o los túbulos.

Ensayos de eficacia

Se han creado varios modelos de pez cebra neurodegenerativos y neuromusculares que pueden utilizarse para la validación de dianas y el cribado de posibles fármacos para tratar estas enfermedades. Estas enfermedades incluyen la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Alzheimer, la epilepsia y la enfermedad de Huntington.

En conclusión, las líneas transgénicas fluorescentes de pez cebra son una poderosa herramienta para el descubrimiento y desarrollo de fármacos. Ofrecen a los investigadores la posibilidad de rastrear órganos y células específicos, lo que facilita la detección de malformaciones y la evaluación de la toxicidad potencial de los compuestos. Además, pueden utilizarse para estudiar la eficacia de nuevos fármacos, sobre todo en enfermedades raras que afectan a un número reducido de personas.